La t铆pica Miss Vico


1
Solo hay una Miss Vico. No tiene sin贸nimos ni sin贸nimas.

2
Es martillo y cereza y rev贸lver. Le salen lianas de las caderas. Es un pedazo de selva amarilla en nuestro zoo de cloroformo.

3
Parece una vela pero es una antorcha, parece una cima pero es un cr谩ter, parece una persona pero es una g茅minis.

4
Se puede regresar de una persona, pero de una g茅minis jam谩s se regresa.

5
Una persona luce, una g茅minis incendia. Una persona alcanza, una g茅minis trastorna. Una persona empuja, una g茅minis zarandea.

6
Podr谩s detener o callar o encerrar a una persona, pero jam谩s a una g茅minis (ni con freno de oro, ni con bozal de plata, ni con grilletes de bronce)

7
Solo hay una Miss Vico. Dios solo la imprimi贸 una vez. Por una sola cara.

8
No trates de volar con ella, porque no se fabrican alas de su talla en el mercado.

9
No trates de traducirla, porque ni ella se comprende en su propio idioma.

10
No trates de situarla, porque est谩 por trazarse su mapamundi.

11
Ella es una tormenta de ellas. Ella es un bosque de mujer y un enjambre y una manada.

12
Puede hacer cualquier papel. Le sale bien el de orqu铆dea pero mejor el de pantera.

13
Solo hay una Miss Vico. Camina sin c贸digo de barras.

14
A m铆 me gusta m谩s que los 谩rboles, pero el que se muere por ella es mi bol铆grafo.

15
Mi bol铆grafo ama la cantidad de cachorro que conserva su leona.

16
Mi bol铆grafo ama la variedad de colores con que muda su serpiente.

17
Mi bol铆grafo ama la miel que elabora desde que hizo una huelga a la colmena.

18
Mi bol铆grafo es mi fontanero. Escribe de lo que se me atasca en la mente.

19
A m铆 se me ha atascado ella.

20
Cualquiera se vuelve poeta si se te atasca el viento y su pelo largo. Cualquiera escribe un Egipto si se te pone el Nilo a la vista.

21
Solo hay una Miss Vico. No vino al mundo para gustarte.

22
No es una mujer verde ni reverde, sino la t铆pica.

23
No es de esas que salen el lunes con cara de lunes y ropa de lunes, sino la t铆pica.

24
No es de esas que se quedan quietas en el poema para que les coloques bien los adjetivos, sino la t铆pica.

25
La t铆pica que abrilea en mitad de agosto y sabadea en mitad de martes.

26
La t铆pica que dirigir谩 su balsa hacia la cascada solo por no subirse a tu barco.

27
La t铆pica muy capaz de salir de los peores laberintos y extraviarse por caminos rectos.

28
La t铆pica que cruzar谩 a nado el r铆o lleno de cocodrilos solo por no utilizar tu puente.

29
La t铆pica que con tus prejuicios se hace preciosos jerseys de punto.

30
La t铆pica que se sale de todas las cajas hasta que te hace tirar el poema.

31
La t铆pica viconube. La t铆pica vicocurva. La t铆pica vicotruena.

32
La t铆pica vicoblue.

33
La t铆pica mujer que te encuentras una sola vez en toda la vida.


Vicovictory


NACI脫 CULEBRA pero maullaba; creci贸 gataza pero con alas de lechuza; como no coincid铆a con las mujeres standard los viejos druidas se reunieron, agitaron su marmita, sali贸 el or谩culo, “pobre del que se fije en la belleza de la pantera y no en sus garras”. As铆 vivi贸 oscura y sin saberse hasta que rompi贸 su 煤ltima capa de vulnerable: aprendi贸 a boxear y mir贸 al cielo; buscaba por todas partes el flequillo de las nubes, la melena de las tormentas: quer铆a poner el punto exacto sobre la jota maravillosa. Un d铆a se sinti贸 preparada: entonces licenci贸 a su colibr铆 y sali贸 de la cueva poderosa, due帽a de todas sus flechas, cada una de ellas untada de Victoria.

Vicomusic


LO PROPIO del jilguero que bebi贸 por error de un charco de ginebra es que ya no quiere cantar las mismas canciones: quien cant贸 distinto una vez, ya no regresa a su antigua caja de m煤sica. Te dije que la chica de la melena caoba aprendi贸 pirotecnia y podr铆a peinar un Van Gogh en tu cabeza, pero cuidado: debajo de su melena, viene toda la leona. Ella bebi贸 de todos los charcos y de todas las ginebras y ya no se conforma con la misma m煤sica ni las mismas canciones. No sabe de mapas: sabe de lugares. No busca metas: busca traves铆as. No regala belleza: regala electricidad.

Vicocean


NI LA ley ni el chacal ni el cuerno podr谩n hoy ni ma帽ana ni ma帽anunca con esta mujer plurimujer esculpida en seda y acero: de Victoria Tenamoras porque tiene la ternura del roc铆o y la dureza del trueno, es como una mu帽eca de fantas铆a que llevara perfectamente doblado en el bolso un kalashnikov. Ponle un escollo que lo supera, dale una orden que la muerde, ac煤sala y ser谩s t煤 el acusado, dile que se calle y rociar谩 toda tu avenida con sus decibelios. Yo tambi茅n pensaba que era un hermoso pez de acuario pero no: ella es una mujer de oc茅ano, y su alma es de tiburona.

Vicosed


CUERDA NO EST脕, os lo aseguro, pero tiene una aver铆a de las m谩s bonitas que he visto, de un rojo tan travieso que imagino que lo suyo le habr谩 costado encontrarlo: parece como un ave migratoria que se hubiera salido adrede de la perfecta uve que sus compa帽eras dibujan en el cielo. A veces, cuando pienso en ella, me acuerdo de aquellas cabras que los griegos llamaban quimeras. Pero sea su locura de trigo o de diente de le贸n, tampoco pens茅is que es una mujer gota a gota, sino una mujer catarata, y quiz谩 sea su secreto esa Victoria desencadenada, ¿pues sab茅is lo que es triste, yo que soy perito en la tristeza? Hay tantas personas que teniendo las alas grandes les faltan las ganas de volar; y tantas gentes que teniendo agua de sobra les faltan las ganas de beber, que me fascina el rel谩mpago alegre de esta mujer que tiene alas, y agua, y sed, y ganas.

Vicodance


SER脕S PROBADA. Los seres repetidos de la normalidad escupir谩n en tus centros m谩s nobles, tratar谩n de vaciar tus estanques, cambiar谩n el ritmo de tus agujas. Pero la naturaleza guarda un secreto; ella protege a quienes desean ensancharse: duendes m谩s viejos que el sol te mantendr谩n siempre adolescente. Te sentir谩s d茅bil: eso significa que pronto te sentir谩s fuerte. Te sentir谩s vac铆a: eso significa que pronto te sentir谩s llena. Te sentir谩s estancada: eso significa que pronto te sacar谩n a bailar a la pista, y cuando bailes…


Vicoartic


COMO NADIE le dijo que no se pueden cultivar tulipanes en el 脕rtico, ella fue sembrando bulbos entre el hielo, a ver qu茅 pasa, confiada de su pasi贸n y su fuego, y ahora sus ejemplares son los m谩s deslumbrantes en el mercado de las flores, cotizados como el caviar de los p茅talos, de tonos tan vivos que parece que fueran a cantar, de forma que se guardan colas en su florister铆a y hasta los m谩s viejos se hacen preguntas maliciosas: ¿a tantos les gustan de pronto los tulipanes del 脕rtico... o lo que de verdad les gusta es el reflejo que hacen sobre los ojos de la tulipanera?

Vicojungle


FAMA Y champagne de la selva es el le贸n de ojo sangriento, la gacela de pies repetidos o el elefante cuyas pisadas aflojan los clavos de las estrellas, pero ni los cazadores m谩s rematados han visto nunca a la vico, animal misterioso y amarillo que se oculta en los baobabs de la noche. Ancianos hechiceros refieren a la vico como felino que camina con las caderas y tiene el cr谩neo situado en la parte del coraz贸n; pero cr贸nicas m谩s antiguas aseguran que es especie anfibia, mitad ave y mitad serpiente, que se alimenta de su propio cuerpo de continuo renovado. M谩s consenso hay en los efectos que produce. Se dice que a la sola visi贸n de la vico el tigre ya no quiere ser tigre, ni el b煤falo b煤falo, ni cebra la cebra. Cada vez que se mueve, los osos despiertan y prenden fuego al invierno. Cuando baila, los bulbos germinan, el viento a煤lla, la selva se ancha.

Vicofire


NO ES igual la luz que procede del fuego que la de los fluorescentes a diez euros de las tiendas iguales de nuestras ciudades siempre iguales. Mujer lo puede ser cualquiera, pero gran mujer solo puede ser la que es mala: la que salta el muro, la que levanta la voz, la que dice no, la que besa a la serpiente, la que asusta tanto a los hombres que yo les he o铆do decir, hablando de Miss Vico: "Para talar un 谩rbol como ella no existen hachas en el mercado". Esta mujer se invent贸 su luz con las propias manos, frotando piedras, una a una, hasta lograr la chispa y moldear la llama, y por eso su brillo no es el de las bombillas: es el de las hogueras. Ella no brilla porque luce: brilla porque arde.